Local muy cuco es decir pequeñito. Trato súper amable. Fuimos entre semana a mediodía, también tienen take away, y es mejor reservar si vas en fin de semana. La cocina es tipo fusión indo china con sabores sorprendentes y deliciosos, en algún caso un poco picante, mejor indica el nivel de picante que quieres al camarero. Tienen salsa especial bajo demanda para los más valientes!! Cocina sin fritura (air fryer).

Simplemente WOW! La comida y el trato fueron un 10/10! Todo sabrosísimo y hecho con máximo mimo y atención al detalle. Fuimos de casualidad, pero ahora no podemos esperar para volver y probar todo lo que no pedimos la primera vez. Y si no sabes qué pedir, déjate aconsejar por la cocinera!

Local pequeño con opción de comer allí. Muy recomendado tanto por la comida como por el servicio. Las imágenes hablan por sí solas. No hubo nada que no nos sorprendiera ni nos gustara! Sin duda volveré para probar el resto de la carta.

Visité Shlen, un restaurante de comida vegana, y aunque no soy vegano, debo decir que me sorprendió gratamente la experiencia. Desde el primer momento, el ambiente del lugar es acogedor, con una decoración moderna y cálida que invita a relajarse. La carta es variada, con opciones que van desde platos innovadores hasta clásicos veganos. Probé varios de sus platos y, aunque al principio tenía mis dudas, cada bocado fue una revelación. Los sabores son intensos, bien equilibrados, y los ingredientes frescos y de calidad. La textura de los platos, como los pato Pekin o sus bombas , me dejaron sin palabras. La creatividad con la que preparan sus recetas es notable, y la presentación de los platos también es un punto a favor. Lo que más me impresionó fue la capacidad de Shlen para hacer que alguien que no sigue una dieta vegana disfrute de su comida. Definitivamente me llevé una sorpresa y ya estoy planeando mi próxima visita. ¡Altamente recomendado para quienes quieran experimentar la comida vegana de una manera deliciosa y sin compromisos!

Si buscas una experiencia culinaria única que combine la frescura de la cocina asiática vegana con influencias del Medio Oriente, este restaurante es una parada obligatoria. La creatividad en sus propuestas, como los baos de hongos shiitake y los triángulos de arroz picantes rellenos de carne de soja, ofrece una fusión deliciosa y sorprendente. Además, el pato pekinés vegano es una verdadera joya, logrando capturar la esencia de este clásico de manera innovadora. Y algo que realmente destacó para mí de este lugar es su cuidadosa recomendación de bebidas, que maridan a la perfección con el plato de tu elección, elevando la experiencia gastronómica a otro nivel. Es una opción excelente para aquellos que buscan explorar nuevos sabores y tendencias, sin perder el toque tradicional que caracteriza a la cocina asiática. Si eres un amante de la buena comida y de la innovación en la cocina vegana, este restaurante es el lugar perfecto para disfrutar de una experiencia culinaria excepcional. PS. Nos encantaron tantos los baos que ya tenemos programado nuestro pedido en Ubereats para esta tarde y volveremos pronto de seguro. 🤭🤭